Intervención del Presidente del IEDF, durante Firma de acuerdo entre partidos

Transcripción de la intervención del Consejero Presidente Mario Velázquez Miranda durante la Firma del Acuerdo de Civilidad y Compromiso que celebran los partidos políticos contendientes en el Proceso Electoral Ordinario 2014-2015, para la elección de diputaciones locales a la ALDF y jefaturas delegacionales en la Ciudad de México, ante los consejeros electorales del IEDF.

CP Mario Velázquez Miranda

Para el IEDF es importante contar con la presencia de las representaciones de partidos políticos que nos acompañan en la subscripción de este pacto de civilidad que responde a una exigencia social, a un deber que como actores políticos se tiene para con la ciudadanía del DF, cuya inconformidad y desencanto con algunas instituciones esenciales para la democracia, no pude ser ignorada.

Tampoco puede dejarse de tener en cuenta que esta ha derivado en una sensación de enfado hacia los partidos, autoridades electorales, gobiernos y candidatos

Suscribir este documento, no es solamente una manifestación de buenas intenciones expresadas para quedar justo en esto, ni es, por parte de esta autoridad un recordatorio respecto a los deberes de conducta que como partidos políticos, la ley impone a los institutos políticos, a los dirigentes ya a sus militantes y simpatizantes y tampoco es para nosotros una reiteración pública del deber que tenemos como autoridad, queremos ir más allá de eso, queremos suscribir un compromiso ético ante la ciudadanía en torno a las responsabilidades compartidas respecto a la seguridad, la paz, la estabilidad y el orden necesarios para figurar la preservación del estado de derecho ene l proceso electoral en curso.

El momento histórico por el que atraviesa el país, es especialmente complejo, al transcurrir en un ambiente político y social enrarecido en el que los mecanismos diseñados para el desarrollo de los procesos democráticos por medio de los que se genera la voluntad colectiva de la nación y se distribuye el poder público, se topan con diversas dificultades para su adecuado desarrollo, lo que ha generado incertidumbre en el electorado en algunos aspectos particularmente respecto de la forma de expresar por la vía pacífica, el pluralismo de la sociedad capitalina y resolver los conflictos sociales.

Las respuestas que como autoridades y partidos políticos demos a la coyuntura actual, no puede ser una más de las que ya se han ofrecido, ante los sentimientos de desconfianza que amenazan con generar un menoscabo en la legitimidad misma del proceso, se nos exige adoptar en las más amplias medidas las posibilidades de que la ley nos confiere, medidas contundentes contra las prácticas viciadas de las que se han dado cuenta últimamente a partir de las quejas que han llegado a este instituto.

La suscripción de este pacto es un compromiso que enmarcamos ni solamente en los rangos legales, sino también es un compromiso ético que se asume plenamente e implica la renuncia de todos los involucrados a cualquier influencia indebida en electorado, a no basar sus estrategias de campaña en argumentos en los que se aprovechen las deficiencias de la norma para justificar la obtención de ventajas indebidas, cometer o provocar actos de violencia o a incitar a los partidarios a cometer en contra de propuestas políticas con las que no se compite.

Este pacto de civilidad que se ha propuesto, conlleva el deber de asumir por propia convicción y con total sinceridad, un compromiso que requiere la imposición de límites de cara a la ley y la ciudadanía, para no anteponer los intereses políticos y personales propios, por legítimos que sean, al bien superior de la comunidad y de la democracia, asegurando la preservación del valor supremo de las campañas, la equidad en aras de la credibilidad pública de partidos, candidatos e instituciones, honrando el deber de observar un respeto al libre ejercicio del voto y un voto informado, particularmente en este ejercicio.

Nuestra presencia a la suscripción de este pacto, como titulares del órgano encargado de la función electoral en la ciudad, obedece a un ánimo para extender hacia nosotros, el alcance de este compromiso, de cara ante ustedes, pero principalmente ante las y los ciudadanos del DF a quienes les aseguramos que pueden tener la seguridad de que actuaremos con rectitud, honorabilidad, imparcialidad y transparencia, consientes de que nuestras decisiones dependen en buena medida en restaurar el menoscabo que ha sufrido la confianza social en las campañas y el fortalecimiento de la integridad electoral que debe imperar en todas las etapas y respecto a todos los actores involucrados en el proceso electoral.

Como parte de este compromiso, expresamos en forma decidida y firme que estamos ciertos en que nuestro deber principal, es respetar y asegurar con autonomía e independencia, el respeto a las leyes que rigen la materia.

Somos una institución sólida y no titubearemos ni cederemos a ninguna clase de presión para preservar las condiciones de equidad en la contienda, seremos firmes en la aplicación de las normas, procedimientos y lineamientos que nos permitan identificar en forma clara y suficiente, todas  aquellas conductas respecto a las que se ha demostrado plenamente que no se ajustan a la ley.

Queremos que los habitantes del Distrito Federal, tengan la certeza de que sabemos la importancia que nuestro trabajo tiene para la sociedad, a ella nos debemos, ante ella seremos responsables de nuestros actos y por ella trabajaremos para asegurar que los resultados del próximo 7 de junio, reflejen la auténtica voluntad de los votantes, mediante la efectiva preservación de la libertad, la justicia y la competitividad electoral.

Agradecemos a todos quienes hoy asisten a la firma de este acuerdo y desde luego, advertimos en ellos el claro compromiso con la sociedad particularmente con la democracia de esta gran ciudad.

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