España. – Después de eliminarlos de la Copa del Rey, el Barcelona consiguió derrotar por segunda vez consecutiva al Real Madrid en la Liga Española.
Después del 0-3 del pasado miércoles que dio al Barcelona la clasificación para la final de la Copa del Rey, el Santiago Bernabéu acogió un nuevo clásico, esta vez de Liga. El partido supuso la última oportunidad para el Real Madrid, que ahora está a doce puntos de los azulgrana, de mantener viva una pequeña opción al título.
Los de Valverde, por su parte, afrontaron el duelo con la aspiración de desbancar definitivamente a los blancos, a los que dejaron muy tocados, sin Copa y sin Liga en apenas tres días. Hasta este sábado, Real Madrid y Barcelona empatan a 95 encuentros oficiales ganados en 87 años de rivalidad.
Con un Messi algo más enchufado, pero no decisivo, con un enorme Piqué y un elogiable Arthur, Valverde mantiene el paso firme en una Liga a la que un Madrid tan esforzado como incapaz, algo inédito en la Casa Blanca.
El Madrid volvió a irse de vacío en un Clásico, segundo consecutivo, ambos en el Bernabéu, 180 minutos sin celebrar un solo gol, lo que ante el Barça solo puede suponer una cosa: derrota. Piqué firmó uno de los mejores partidos de su carrera, en ese estadio que tanto le pone, en el que los pitos son música para sus oídos. Tapó incontables remates, salió al corte, mandó por alto y hasta quiso lucirse con un peligroso esprint en paralelo a la línea de fondo que acabó en córner.
El único gol del encuentro lo marcó Rakitić en el minuto 26 y con la espléndida actuación del Barcelona que superó al conjunto local en el Bernabéu y logró anular las oportunidades de su rival y llevarse el clásico con la mínima diferencia.
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Con información de El País y Marca.
