RESPIRando: Yoga para superar el duelo

Como haya sido, Tlahuelilpan es una tragedia

Lo ocurrido hace unos días en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, ha dividido la opinión pública.

Algunos señalan que las víctimas (109 muertos y 40 heridos hasta el momento de esta publicación) son consecuencia de un acto delictivo; mientras que otros aseguran que era gente inocente motivada por la necesidad.

Como haya sido, la explosión del ducto de Pemex, las imágenes que circularon en redes sociales y el saldo, son hechos que han impactado al país.

A casi una semana de lo sucedido, no hay lugar donde no se hable del tema; cierto es, pues, Tlahuelilpan movió y sigue moviendo todo tipo de emociones.

Las voces de Tlahuelilpan

Testigos de ese viernes 18 de enero han contado a diversos medios de comunicación las estremecedoras imágenes que presenciaron.

“Había adultos, pero también niños. Pedían ayuda, gritaba que se estaban muriendo. Y muchos murieron. (…) Nunca había visto algo así, era como un infierno”.

Teresa Zacarías, en entrevista para BBC News

“Cierro los ojos y veo todo, sus gritos. Apagué a cinco, me decían: ‘ayúdame, ayúdame’, pero cómo lo hacía si el calor no te dejaba acercar”.

Sergio “N”, en entrevista para La Razón

“No sabemos si está muerto o vivo o si quedó algo (su sobrino)”.

Zazil López, declaró a Milenio

“Estamos pasando por una situación muy difícil y muy triste para el pueblo de Tlahuelilpan. Es muy triste caminar por las calles y ver, sentir la tristeza y ver que van y vienen cuerpos a sepultar a la iglesia de regreso. Es muy triste”.

Martha Rodríguez, dijo a Noticieros Televisa

A casi una semana de la tragedia, el ánimo en Tlahuelilpan ha decaído y las calles permanecen desiertas, cuentan sus habitantes.

El dolor por una pérdida

Inevitablemente todos hemos sentido, en algún momento de nuestra vida, el dolor por una pérdida.

El fallecimiento de un ser querido, una ruptura amorosa o la pérdida de un trabajo, son situaciones que nos generan una clase de duelo.

Según la revista Psychological Science, este tipo de experiencias emocionales generan más dolor de lo que imaginamos ya que surge de los recuerdos, a diferencia del dolor físico que se debilita con el tiempo.

Por su parte, el médico especialista en gerontología clínica y psicogerontología, J. Montoya Carrasquilla, asegura que el dolor provocado por el duelo es total.

“Es un dolor biológico (duele el cuerpo), psicológico (duele la personalidad), social (duele la sociedad y su forma de ser), familiar (nos duele el dolor de otros) y espiritual (duele el alma). En la pérdida de un ser querido duele el pasado, el presente y especialmente el futuro. Toda la vida en su conjunto duele”.

Otros especialistas indican que este tipo de dolor se debe a que los humanos, por naturaleza, creamos un sentimiento de apego con personas y cosas que nos rodean diariamente y al perderlas caemos en depresión.

Por ello, señalan, es importante entender que el apego no es amor sino una dependencia para darle sentido a la vida.

¿Superar el duelo? Tiempo al tiempo

Aunque las personas somos diversas y las situaciones distintas, algunos aconsejan para superar el duelo:

Tiempo al tiempo. Es necesario darse un tiempo para asumir la pérdida y afrontar la situación. El periodo de cada persona es diferente, con base en su realidad.
Expresar los sentimientos.Los expertos recomiendan hablar con familiares y amigos. Aseguran que entre más se hable del tema, se procesará más rápido la pérdida.
Recordar los buenos momentos. Ya sea hablar de los instantes compartidos con el ser perdido o pensar en los gratos momentos que se vivieron en un trabajo del que ya no somos parte.
Entender que la vida sigue.Sea la experiencia que se esté viviendo, la vida continúa y hay personas que nos necesitan a su lado.
La diversión no es un pecado.Asistir a fiestas o reuniones con la familia o amigos podría disminuir la tristeza.
Rutinas y hábitos. Son grandes aliados para regresar a la realidad.

Yoga en el proceso de duelo

Científicos de la Universidad Católica de Leuven, en Bélgica, han comprobado que el yoga contribuye a tratar problemas de depresión.

Y es que, afirman, esta disciplina se sustenta en técnicas de atención y conciencia plena que ayudan a situarse en el aquí y ahora.

Explican que la técnica de mindfulness invita a reducir los estímulos externos a “simplemente estar” en una situación donde “nada pasa” y sin emitir juicio alguno.

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Asimismo, el Bhagavad-gita, que es como la Biblia del hinduismo, establece como objetivos del yoga el control de alteraciones mentales, reducción de sufrimiento, desarrollo de la espiritualidad y el control de la respiración.

Aunque hay muchos tipos de yoga, todos comparten el trabajo de concentración y meditación, por lo tanto, los beneficios que aporta a nivel mental en el proceso de duelo son: